Escuelas en lucha: La respuesta del gobierno porteño.
El Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires denunció penalmente a 366 “adultos responsables de los estudiantes que hubieran participado” en tomas de escuelas secundarias por diversos reclamos, en tanto ya están en curso 21 denuncias civiles por daños y perjuicios por los días de clase perdidos por más de 50 millones de pesos.
Según precisó este lunes el Ministerio de Educación porteño en un comunicado, “cuando comenzaron las tomas en las escuelas, la Ciudad decidió denunciar penalmente a los adultos responsables de los estudiantes que hubieran participado de las mismas”.
En tal sentido, agregó que la Procuración General de la Ciudad ya realizó “25 denuncias penales a 366 adultos responsables”.
“Nuestra obligación como adultos es enseñarles a los chicos a dialogar y a participar, pero entendiendo siempre que hay otros derechos que deben respetarse y que todas esas diferencias deben poder convivir en una misma sociedad”, señaló la titular de la cartera educativa local, Soledad Acuña.
El Ministerio también envió a la Procuración General de la Ciudad de Buenos Aires un informe técnico que “cuantifica el valor correspondiente al pago diario de salarios de personal de las escuelas tomadas, para transferirles a los adultos responsables el costo laboral que implicó tener cerradas las escuelas”.
Como consecuencia de este informe ya están “en curso 21 denuncias por daños y perjuicios por los días de clase perdidos, por un monto que asciende a $50.538.442,85”, detalló la cartera de educación.
¿No les da bronca esto?, le quieren sacar a los pibes el derecho de protesta, ¿Qué les espera a las nuevas generaciones?
Sin armas, sin violencia, sin cortar calles, sin ningún acto de esos que la derecha tanto odia (pero aplica cuando le conviene), un enorme grupo de adolescentes se plantan en las escuelas, sus escuelas, su lugar de identificación. Exigen derechos, exigen una educación digna, exigen comida de calidad, exigen que los techos no se les caiga en la cabeza, que las paredes no se electrifiquen cuando llueve.
Los pibes y pibas aprendieron más de lo que ELLOS hubieran deseado. Aprendieron a organizarse y sobre lucha, a defender ideales y dignificar para ellos y para las generaciones futuras lo que debería ser prioridad en un país.
Aprendieron a ser críticos con “los de arriba”, entendieron que conjuntamente pueden dar vuelta la torta.
Aprendieron que no necesitan un chumbo para demostrar nada, que no tienen miedo a que los lame botas que defienden, armados, a gobernantes corruptos entren a las escuelas a reprimirlos. porque lamentablemente esta “perdida generación” también aprendió sobre leyes e historia.
“Nuestra obligación como adultos es enseñarles a los chicos a dialogar y a participar, pero entendiendo siempre que hay otros derechos que deben respetarse y que todas esas diferencias deben poder convivir en una misma sociedad”, señaló la titular de la cartera educativa porteña, Soledad Acuña en una irónica mirada adulto centrista.
Dejaremos que nuestro amado Galeano le conteste:
“La cultura de consumo, cultura del desvinculó, nos adiestra para creer que las cosas ocurren porque sí. Incapaz de reconocer sus orígenes, el tiempo presente proyecta el futuro como su propia repetición, mañana es otro nombre de hoy: la organización desigual del mundo, que humilla a la condición humana, pertenece al orden eterno, y la injusticia es una fatalidad que estamos obligados a aceptar o aceptar.”
Desde la Agrupación de Frente apoyamos la lucha de los pibes, la libertad de opinión y protesta es un derecho que no nos van a arrebatar!