LULA LIVRE

“FUÍ VICTIMA DE LA MENTIRA JURÍDICA MÁS GRANDE DE LOS ÚLTIMOS 500 AÑOS” DECÍA LUÍS IGNACIO LULA DA SILVA LUEGO DE QUE UN JUEZ ANULARA SUS CONDENAS.

El Ex Presidente de Brasil, agradeció la solidaridad del Papa Francisco y de Alberto Fernández quién lo visitó en la Policía Federal de Curitiba, en un acto de decencia y coraje destacó Lula. Además destacó a Pepe Mujica, a quién definió como una de las personas más extraordinarias que conoció.
Lula da Silva recuperó sus derechos políticos y puede ser candidato en 2022, luego de que el juez del Supremo Tribunal Federal, Edson Fachin anulara todas sus condenas por presunta corrupción. La caída de las causas no se da como un hecho aislado, sino que vienen en el marco del escándalo por las revelaciones sobre el complot entre el es juez Sergió Moro y el grupo de fiscales que montaron la operación Lava Jato en contra del líder latinoamericano, y por la cual hasta el día lunes estuvo detenido.
La caída de la bolsa, el nerviosismo de Jair Bolsonaro fueron muestra inmediata de la reacción de la derecha brasilera ante la posibilidad de competir en una futura elección contra el líder popular, quien en todas las encuestas obtiene un piso del 50% de votos del padrón electoral.
El primer discurso del ex presidente, se dio en el Sindicato de Metalúrgicos del ABC, en San Bernardo do Campo, en el cordón industrial de San Pablo, lugar elegido estratégicamente, ya que se trata del mismo sitio en el que fue detenido por las causas anuladas en la actualidad.
En tan solo dos días Luis Ignacio Lula Da Silva ya hizo temblar a la derecha brasilera, y los debilitados gobiernos aliados a las políticas de Jair Bolsonaro presentes en la región. La lucha es cada vez más fuerte, ya sin armas, ahora el Lawfare, las causas débiles prearmadas, la presión de los medios, y la desestabilización económica son los métodos elegidos por los “mismos de siempre”, por las oligarquías regionales para recuperar o mantener su poder ante el crecimiento de los gobiernos populares en la década pasada.
El bloque latinoamericano parece recobrar la fuerza popular, la derecha tiembla y muestra su peor cara, Brasil enciende una nueva esperanza de una Latinoamérica unida y fuerte.